En mi familia siempre hemos apreciado el pan. Uno de mis bisabuelos era panadero, ¡vamos, qué se ganaba el pan con el pan! Hoy en día me siguen contando historias de lo temprano que él se despertaba y del sabor inconfundible del pan de aquella época. Mi madre, criada en una familia muy vinculada al pan, sigue preparando pan casero casi todos los días. Le encanta variar: pan redondo o pan plano, con oliva y tomate seco o una mezcla de semillas, con una combinación de las varias harinas que tiene. Hoy, inspiradas por el precioso amarillo de los girasoles, hemos preparado un pan con harina de cebada y semillas de girasol.
“Nadie es mejor que el pan” («Никой не е по-голям от хляба»), dice un dicho búlgaro, refiriéndose a que todo el mundo necesita comer. Еl pan es una parte imprescindible de cualquier comida tradicional desde hace siglos. Durante los días festivos el pan es sagrado y su decoración es un arte en sí. Precisamente con pan y sal se da la bienvenida a todos los invitados. El pan dulce (con miel) es parte de todas las tradiciones búlgaras que simbolizan la acogida de un miembro nuevo: cuando nace un bebé, cuando la novia entra en la casa de los padres del novio, cuando los niños empiecen el colegio por primera vez.
“El pueblo mira el pan como algo sagrado, el pan no se deja yacer en la mesa boca abajo, a los invitados importantes se les ofrece pan con sal, no se puede pisar el pan, y en las fiestas cristianas siempre están el vino y el pan.”
cita de la historia «Pan» del escritor búlgaro Yordan Radichkov
Pan con harina de cebada y semillas de girasol
Delicioso pan casero
Yields: 1 hogaza de pan
- 250 ml agua con gas
- 1 cda sirope de arce
- 3 cdas aceite de oliva
- 1 cdta sal
- 10 g levadura de cerveza
- 200 g harina de cebada
- 300 g harina de trigo
- mezcla de semillas y semillas de girasol al gusto del consumidor
Pon las harinas en un bol grande. Mézclalas y abre un hueco en el centro.
Caliente un poquito el agua con gas y pon dentro la levadura de cerveza y el sirope de arce.
Vierte el liquido en el hueco y añade aceite de oliva y sal.
Haciendo movimientos circulares con una espátula, empiece a combinar las harinas y el líquido hasta que se forme una bola suave.
Espolvorea la mesa con un poco de harina y pon la masa sobre ella. Amásala durante 5-10 minutos, añadiendo poco a poco de la mezcla de semillas.
Haz una bola y déjala reposar cubierta con un paño de cocina unos 30-40 minutos.
Prepara la forma del pan y pon la masa en una fuente (La mía tiene dimensiones 22x10x6 cm.).
Deja la masa reposar durante media hora más.
Mójate la mano con un poco de agua caliente y pásala sobre la superficie del pan para poder pegar encima las semillas de girasol.
Hornea el pan en la bandeja más baja del horno, a 210 grados, sin ventilador, durante 30-35 minutos.
- Preparation time: 85 minutos
- Cook time: 35 minutos
- Total time: 2 horas
“Todos los días preparamos dos hornos de pan, el sábado tres. Esto no termina nunca, el pueblo siempre tiene hambre, es lo que Dios inventó: que el hombre coma tres veces al día. Tres veces y que cada vez tenga pan en la mesa.”
cita de la historia «Pan» del escritor búlgaro Yordan Radichkov
Hay algo especialmente reconfortante en el aroma de una hogaza recién hecha, con su corteza dura y crujiente y su miga suave y mullida. Te invito a una rebanada de pan con harina de cebada y semillas de girasol, generosamente untada con salsa de pimientos rojos y tomate. En el caso que no puedas pasar por mi casa, ¡ponte a hacerlo!
Sus recetas son riquisimas y saludables. Recientemente hice un queso de garbanzo, quedo super bueno.
Me parece estupenda su receta, voy a probarla y le cuento